ANÍBAL FERNADEZ A LOS GRITOS EN EL 21

El martes pasado compré un grabador digital nuevo: marca Sony, más moderno que el que tenía, parecido… pero distinto.

El tema es que no lo manejo del todo bien todavía. Tiene un volumen bastante más fuerte que el anterior.

Ayer jueves estuve en el Alvear Hotel  por la reunión del «Americas council of the Americas», este evento anual al que suelen ir a… (encontrarse?) los más importantes empresarios y funcionarios políticos nacionales junto con lo más destacado de la representación norteamericana en el país.

En este contexto me encontré con Aníbal Fernandez, que venía originalmente a defender la posición del gobierno con respecto al tema «papel prensa» (con fotocopias y todo) pero se cruzó en el camino con declaraciones que lo exasperaron bastante… justamente a él! (qué raro!)

El empresario Italo-automotriz Cristiano Rattazzi había dicho algunos momentos antes que la Argentina debía retomar la senda de la seguridad jurídica. Además se había quejado de la inflación que se notaba en los salarios y para rematar había dicho que los empresarios «no son felpudos del gobierno»… imaginensé!

Ahí salío el bigote mas espeso del gobierno a cruzar esos dichos.

Desde «Yo tampoco soy felpudo de Rattazzi» hasta «con él depende de qué pastilla se tomó al levantarse» pasando por «Que Rattazzi diga que no hay seguridad jurídica es una afrenta para los argentinos»

Grabé todo en mi nuevo y potente grabador y me fuí a hacer algunas cosas que tenía pendientes por Villa Devoto.

Como conseguí algunas monedas pude tomarme el 21 para volver a casa, ya que a la tarjeta «SUBE» que la presidenta anunció «sin falta» para junio de 2009 todavía la estamos esperando.

Me senté por la mitad del bondi y al apoyar mi mano sobre el bolso evidentemente presioné «Play» porque  la voz de Anibal brotó potente y diáfana: «Yo no soy felpudo de rattazi!» 

me desesperé y traté de ubicar el grabador para que Anibal se callara o por lo menos dejara de gritar. Pero me equivoqué de bolsillo y los gritos siguieron: «lo que dice Rattazzi es una afrenta para los argentinos!»

finalmente dí con el aparato y llegué a apagarlo no sin que antes se escuchara la voz aguardentosa del ministro diciendo que: «Con Rattazzi hay que ver qué pastilla tomó al despertarse!»

Lo apagué. Y al levantar la cabeza me encontré con todas las cabezas del colectivo que me miraban con la misma expresión conque los nativos de una isla miran al paracaidista que acaba de caer del cielo en las películas.

Fue un momento extraño. No dije nada. Bajé la cabeza. Nadie me dijo nada. También… que ocurrencia la mía!

llevar a Anibal a pasear en el 21!